Jueves 25 de mayo de 2017
Cali, Valle del Cauca
Anoche se disputó el clásico vallecaucano por la fecha cuatro de la Copa Águila, un partido lleno de polémicas por el manejo arbitral que tuvo una serie de errores produciendo que los ánimos se calentaran entre ambos equipos e hinchadas.
Todo comenzó con la jugada más discutida, un fuera de lugar que el juez de línea pitó, pero el central no se percató y los dos continuaron la acción que conllevó a que Yorleys Mena eludiera a Quintero y con un potente remate venciera el arco de Pablo Mina al minuto del encuentro.
Tardaron bastante en resolver la duda que tenían y finalmente anularon un gol, el cual el juez de línea no debió proseguir ante un previo fuera de lugar. Al minuto 14 el conjunto dirigido por Héctor Cárdenas realizó una combinación entre Andrés Pérez, quien le da un pase a Sabbag recibiendo de espaldas al rival y con un majestuoso taco se la deja a Amaya, quien hace una gran jugada terminando con un pase a profundidad nuevamente al delantero, para que con su pie derecho y de primera definiera por entre las piernas de Neco Martínez.
Desde la primera polémica los jugadores comenzaron a subir la temperatura del juego, con varias entradas fuertes y roces que llevaron al colegiado castigar severamente con sus amonestaciones, posteriormente conllevó a dos expulsiones por cada bando, aunque le perdonó la expulsión directa a Yorleys Mena en el primer tiempo en una acción en la que con su codo golpea al central Danny Rosero, uno de los expulsados al minuto 51 por doble amarilla en una falta cometida a Juan Camilo Hernández, el otro que se fue a las duchas antes de acabarse el compromiso fue Brayan Angulo con una roja directa en la que se excedió un poco el juez.
Discusiones se vivieron hasta en el banquillo entre los técnicos que estaban molestos por las intervenciones bruscas de los jugadores y el árbitro no tomaba las medidas necesarias, luego se dieron un abrazo entre los dos estrategas.
El clásico se vivió con mucha pasión y hasta más allá del último minuto cuando una jugada pudo cambiar el resultado sino fuera por el arquero Pablo Mina que en una atajada para la foto, le sacó un cabezazo al Cucho Hernández evitando el empate y permitiéndole al Deportivo Cali avanzar como primero de grupo para los octavos de final de la copa, terminando en una riña por parte de los hinchas que no contuvieron la efusividad e invadieron la cancha.
Informa Esteban Prado González
@esteban_prado22
Editor Noti5
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